Por: Lucía Lantigua — La policía catalogó como el décimo feminicidio de este año el asesinato registrado la madrugada del pasado miércoles en la carretera PR-6670 frente al hospital Manatí Medical Center, en ese municipio.
Según la nota del Negociado de la Policía, los investigadores informaron que por los testigos, alrededor de las 5:45 a.m. de ese día, la conductora de un automóvil Toyota Yaris color blanco, transitaba por el lugar con destino a su trabajo como empleada civil en la Administración de Corrección y Rehabilitación, cuando un Jeep se le atravesó en el camino del cual salió un hombre, que resultó ser su expareja, quien comenzó a golpear los cristales.
Acto seguido, la conductora comenzó a retroceder, pero de inmediato el hombre desenfundó un arma de fuego con la que le disparó, asesinándola en la escena. Para luego este privarse de la vida a poco metro de la escena cayendo al pavimento.
Los occisos fueron identificadas como Reinilda Cedeño Álvarez de 45 años y Raúl Robles Miranda, de 57 años, quien laboraba como guardia de seguridad.
Se indicó que la pareja llevaba una relación de 25 años y para el mes de abril Robles Miranda había solicitado una orden de protección exparte, alegando que hace un año y medio confrontaba problemas con su pareja porque se había tornado agresiva y presuntamente lo insultaba.
Además, indicó que si no abandonaba el hogar se iba a agredir para denunciarlo por violencia doméstica. En aquel momento el tribunal expuso que existían motivos fundados para pensar que era víctima de violencia doméstica.
Sin embargo el pasado 30 de abril, solicitó el archivo de la orden de protección, así que no se corroboraron sus alegaciones en una vista judicial.
Cabe señalar, que la pareja no tenía incidentes previos de violencia doméstica.
La agente Rita Rosado, adscrita a la División de Homicidios de Arecibo junto a los fiscales Juan Ayala y Luis Alberto Ramos investigaron la escena.
En lo que va de año 24 mujeres han sido asesinadas, de las cuales diez han sido víctimas de feminicidio, siete vinculadas directa o de manera colateral con el trasiego de drogas, una por robo, tres por venganza, dos en peleas o discusiones y permanece un caso sin determinar el motivo.
Durante el 2023, 11 mujeres fueron asesinadas, de las cuales siete fueron víctimas de violencia doméstica, superando así los casos de este año.
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